El diputado del Movimiento de Participación Popular por el departamento de Tacuarembó, Edgardo Rodríguez elevó una nota al intendente departamental Wilson Ezquerra tras mantener una reunión con vecinos del balneario Iporá. La preocupación radica en la posibilidad de que se instale un local bailable en esa zona.
“Hemos mantenido una reunión con la comisión de vecinos del Balneario Iporá. Nos manifestaron preocupación por la posible adjudicación por parte de la Intendencia, del Parador ubicado al lado de la Piscina del Balneario, con el fin de que allí, una conocida bailería, realice espectáculos bailables o similares”, dice el escrito enviado por el legislador nacional.
Si bien el diputado no tiene la certeza de la instalación del local bailable, actuó acuerdo a trascendidos de la opinión pública. “No sabemos si éste asunto se dilucidará de la forma mencionada o no. De cualquier manera creímos oportuno enviarle ésta comunicación, a efectos de manifestarle nuestra opinión contraria a la instalación de un baile, en forma regular, en el mencionado parador”, sostiene.
Además el legislador se entrometió en un ámbito en el cual no tiene competencia, aunque lo reconoció públicamente. “No está dentro de las competencias de nuestra tarea el autorizar o no, éste tipo de actividades. Queda claro que eso es competencia de otras autoridades, entre las que se encuentra la propia Intendencia. Eso lo reconocemos y lo tenemos claro”, manifestó.
“Sin embargo, como ciudadanos de ésta ciudad y como Representantes Nacionales, tampoco podemos ignorar éstos planteamientos que nos llegan de parte de los vecinos”, destacó.
El jerarca se mostró en desacuerdo con la idea de la instalación del local bailable por cuestiones de seguridad vial y para no interrumpir la tranquilidad y descanso que buscan los turistas que llegan a esa zona.
“Nuestra opinión contraria a la realización de ese tipo de actividades en el lugar de referencia, se fundamenta en los ruidos que generaría a todo el vecindario y en particular al camping que está pegado; y, sobretodo, en una cuestión de seguridad vial: todos conocemos el camino que une a la ciudad con el balneario y nos queda claro lo peligroso que resultaría el flujo de vehículos (motos y autos) que transitarían de ida y de vuelta al baile”, resaltó.
“Sería imposible, en la práctica, sobre todo a la salida del baile, lograr un tránsito ordenado y seguro. Ya tenemos antecedentes fatales en éste sentido. Quizá la posibilidad de destinar las instalaciones del actual parador, a constituir un Centro de Barrio, podría ser un destino útil para estas instalaciones”, señaló.
“Hemos mantenido una reunión con la comisión de vecinos del Balneario Iporá. Nos manifestaron preocupación por la posible adjudicación por parte de la Intendencia, del Parador ubicado al lado de la Piscina del Balneario, con el fin de que allí, una conocida bailería, realice espectáculos bailables o similares”, dice el escrito enviado por el legislador nacional.
Si bien el diputado no tiene la certeza de la instalación del local bailable, actuó acuerdo a trascendidos de la opinión pública. “No sabemos si éste asunto se dilucidará de la forma mencionada o no. De cualquier manera creímos oportuno enviarle ésta comunicación, a efectos de manifestarle nuestra opinión contraria a la instalación de un baile, en forma regular, en el mencionado parador”, sostiene.
Además el legislador se entrometió en un ámbito en el cual no tiene competencia, aunque lo reconoció públicamente. “No está dentro de las competencias de nuestra tarea el autorizar o no, éste tipo de actividades. Queda claro que eso es competencia de otras autoridades, entre las que se encuentra la propia Intendencia. Eso lo reconocemos y lo tenemos claro”, manifestó.
“Sin embargo, como ciudadanos de ésta ciudad y como Representantes Nacionales, tampoco podemos ignorar éstos planteamientos que nos llegan de parte de los vecinos”, destacó.
El jerarca se mostró en desacuerdo con la idea de la instalación del local bailable por cuestiones de seguridad vial y para no interrumpir la tranquilidad y descanso que buscan los turistas que llegan a esa zona.
“Nuestra opinión contraria a la realización de ese tipo de actividades en el lugar de referencia, se fundamenta en los ruidos que generaría a todo el vecindario y en particular al camping que está pegado; y, sobretodo, en una cuestión de seguridad vial: todos conocemos el camino que une a la ciudad con el balneario y nos queda claro lo peligroso que resultaría el flujo de vehículos (motos y autos) que transitarían de ida y de vuelta al baile”, resaltó.
“Sería imposible, en la práctica, sobre todo a la salida del baile, lograr un tránsito ordenado y seguro. Ya tenemos antecedentes fatales en éste sentido. Quizá la posibilidad de destinar las instalaciones del actual parador, a constituir un Centro de Barrio, podría ser un destino útil para estas instalaciones”, señaló.
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