La caravana más grande en la historia de Tacuarembó se vivió el viernes luego de que Sebastián Abreu concretara el gol de la victoria. Sufrimiento mezclado con agonía vivieron los tacuaremboenses durante el partido, de la desazón a la euforia.
Toda la ciudad, no quedó nadie en sus hogares, todos festejando. Pasaron tan solo segundos de la finalización del partido que comenzaron a llegar automovilistas, motociclistas, ciclistas y peatones con las caras pintadas, sus banderas y cornetas que dieron un colorido espectacular.
Todos agradecían a diferentes jugadores, hasta a Luis Suárez por haber atajado con la mano la pelota que valió un penal para Ghana. El triunfo celeste generó un movimiento social que nadie puede lograr, solo el fútbol y un mundial con Uruguay logran ese efecto. Gente con sonrisas, mirando a lo alto, vecinos saludándose, lo mismo que personas que ni se conocen, muchas bocinas sonando, es parte de las consecuencias que se aprecian en Tacuarembó por la buena actuación de Uruguay en el mundial.
“El pueblo está más contento, nos saludamos todos y se ve a mucha gente con banderas uruguayas”, dijo Sonia a El País mientras circulaba por el centro de la ciudad.“La gente no camina mirando al piso, ya estamos con la frente en alto, están todos contentos”, comentó Roberto mientras compraba cigarros en un quiosco.
“Hay como un cambio de aire, hay más alegría, la gente hace sonar las cornetas y toca bocina cada vez que juega Uruguay”, dijo María mientra vestía la casaca celeste. “Acá hacés un trámite en cualquier oficina y el tema no es la inseguridad, ni política, es la actuación de Uruguay en el mundial y la alegría que trae”, indicó Carlos cuando caminaba por la plaza Colón luego de visitar al médico en una mutualista privada.
Además en Tacuarembó aumentó considerablemente la venta de banderas y cornetas. Mitlon Rodríguez, vendedor ambulante en la plaza Cristóbal Colón informó que las cornetas para niños cuestan $50 y las vuvuzelas grandes $150. “Hoy traje 500 banderas, pero no me va a quedar ninguna, es tan grande la demanda que durante toda la semana no tuve mercadería”, dijo. “Hoy no pude ni armar mi stand, la gente se avalancha para comprar todo, las banderas que antes salían $150 hoy las vendo a $300 y también tengo unas más chicas por $200”, resaltó.
“Para mi que haya mundial todos los años, la gente quiere banderas de Uruguay, el pueblo está mucho más unido y en todos los partidos me quedo sin mercadería”, manifestó. “Antes durante el año vendía bastante bien, banderas de Peñarol, Nacional, bufandas, pero ahora es algo increíble, la demanda es impresionante”, destacó.
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